El sábado 10 de marzo fue estrenado el documental "Ruben Blades, is not my name" (2018, Apertura Films), el documento fílmico escrito y dirigido por el también panameño productor, director y artista plástico Abner Benaim, que busca ser un testamento fílmico que trascienda a la figura del ya legendario cantautor panameño hacia la posteridad.
El ícono latinoamericano Rubén Blades estuvo en el centro de la revolución de la salsa de New York en la década de 1970. Sus letras cargadas socialmente y ritmos explosivos llevaron la música Salsa a una audiencia internacional.
Pero Blades no solo se ha destacado en el canto, ganando en su prolífica carrera 17 premios Grammy, tambièn ha actuado en Hollywood y ostenta un título en derecho por la Universidad de Harvard, llegando incluso a postular para la presidencia de su nativa Panamá con el partidad Papa Egoró .
Actualmente reside la ciudad de New York, desde donde comparte su vida en casa y de gira con la Orquesta de Roberto Delgado.
Por su parte, el director aclamado por la crítica, Abner Benaim, a quien debemos cintas memorables en formato de documental de fuerte carga social, tales como Invasión (2014), Historias del Canal, segmento 1977 (2014), Empleadas y patrones (2010), Chance (2009), Good vibes (2003), In the attic (2003) y Round trip to Panama (2002).
En este testimonio sobre el pensamiento y obra del hombre y del músico, Benaim nos lleva en un viaje a través de la carrera de 50 años de Ruben, que revela que Ruben aún podría tener ambiciones musicales y políticas. La película es una celebración de esta leyenda viviente y su lucha para llegar a un acuerdo con su legado.
En la cinta se hace un recorrido visual y musical por los años de presencia de Blades en la escena artística y politica más contemporánea de América Latina, con testimonios de primera fuente, como Sting, Paul Simon, Residente y el sonero puertorriqueño Gilberto Santa Rosa.
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